Fernando Montes Matte, S.J.
Fernando Montes, Sacerdote Jesuita, Rector de la Universidad Alberto Hurtado, es Profesor de Estado, Licenciado en Filosofía, Teología y Sociología. Ha dedicado su vida a la educación en todos sus niveles.
REFLEXIÓN SOBRE LA CALIDAD EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR PARA EL MUNDO DE HOY:
¿QUÉ ES LA UNIVERSIDAD?
¿CUÁL ES SU ROL EN LA SOCIEDAD?
¿EN QUE CONSISTE LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR, QUE SE NECESITA PARA EL MUNDO DE HOY?
¿CÓMO HA DE SER LA FORMA DE APRENDER?
Fernando Montes Matte, S. J. (Transcripción literal del vídeo tomado en Mayo 2012 por la Fundación Gaia)
Mucho gusto de poder responder a estas preguntas, son complejas.
Yo voy a responder espontáneamente, tal vez sin la profundidad y la ilación
que tendría un texto preparado pero, sí tal vez, puedo responder con la
experiencia que tengo de muchos años de conocer el sistema universitario.
A mí no me gusta hablar en abstracto de la Universidad, yo podría hacer una
historia desde Bologna, la Universidad de París, lo que significó la
Universidad Napoleónica, que trae todo a un control estatal, cosa que es muy
ajena a lo que fue el origen de la Universidad, que fue al revés, fue una
salida del control eclesial y el control estatal hacia un mundo del
pensamiento. Está también la Universidad Napoleónica que tiene enorme
influencia en la concepción de la Universidad Latinoamericana. Tampoco voy a hablar de la Universidad del
Cardenal Newman, esa visión universal, o toda la visión de la Universidad
Alemana, pero todo ello tal vez lo voy a tener detrás de la cabeza.
Sobre todo me interesa recordar que nosotros en América Latina somos
herederos de la visión un poco estatista de Napoleón, corregida por una
interesantísima y peligrosa corrección que se produce en Córdoba Argentina, al
comienzo del siglo XX, el año 19, donde
la Universidad de Córdoba reclama una autonomía enorme de la Universidad frente
al gobierno central y eso se expande como una modalidad Latinoamericana de
hacer Universidad.
Pero a mí me parece personalmente, de una manera más sencilla, que una
Universidad podría definirse como lo hace San Alberto Hurtado, de quien
llevamos el nombre en esta Universidad, que fue un Doctor en Pedagogía en su
época, que fue un hombre que pensó mucho la Universidad y el dice que la
Universidad es el cerebro de una sociedad, que piensa la sociedad. No sólo las
personas, su vida, sus problemas, sus esperanzas, sino su convivencia, las
distribuciones de poder y por lo tanto esta Universidad tiene que pensar la
cultura que nosotros tenemos y que cultura trasmitimos a los que vienen
después.
Por su esencia la Universidad tiene una visión amplia, tiene que mirar, a
mi modo de ver, el conjunto de los problemas y ojalá integrar la mayor cantidad
de puntos de vista para acercarnos a la verdad. Yo tengo la sensación que,
marcado por el siglo XIX, muy a menudo entendemos el pluralismo como
incapacidad de decir cuál es mi identidad. Para que todos podamos estar juntos
nadie puede decir lo que realmente es y lo que piensa.